El control de peso es una estrategia para mantenernos sanos y prevenir futuras enfermedades. Se aplica de manera habitual en personas que ya sufren algún tipo de enfermedad crónica. Sin embargo, sobre todo se realiza en personas que necesitan adelgazar o engordar, en etapas de crecimiento y en casos de trastornos alimenticios.
Alcanzar un peso saludable puede ayudar a controlar el colesterol, la presión arterial y el azúcar en sangre. También puede ayudar a prevenir enfermedades relacionadas con el peso (enfermedades cardíacas, diabetes, artritis y algunos cánceres).